Teníamos el naming así que el primer paso era acompañarlo de una identidad visual joven y desenfadada. El resultado fue un divertido logo jugando con el nombre de la empresa, el balido de las ovejas y utilizando el recurso de los puntos suspensivos para darle continuidad a la onomatopeya.
Elegimos un verde y naranja saturados y vibrantes que, con una tipografía redondeada de estilo cartoon, dan una sensación juvenil y de frescura, combinando a la perfección con la personalidad desenfadada de prestamee.
Pero eso no es todo, para añadirle un punto de diversión a la marca creamos una mascota, que no podía ser otra cosa que una oveja claro. Un divertido personaje dibujado con formas sencillas, fácilmente reconocible pero con mucha peeeeersonalidad.